Desde que a mediados de 2020 se instaurase como el básico confortable de cientos de mujeres, alrededor de todo el mundo, las zapatillas han sabido adaptarse con idoneidad a los diferentes armarios femeninos para, cinco años más tarde, seguir liderando en todo tipo de escenarios. Ahora, llevamos zapatillas en todos los ámbitos de nuestra rutina, ya sean días en la oficina o tardes de recados, dejando atrás su concepto puramente deportivo, para abrazar un enfoque más estético, siempre al hilo de las tendencias actuales. 

Sin embargo, como ocurre con otras prendas de rápida popularidad, las zapatillas “de vestir” también han vivido una importante crisis de identidad durante los últimos años, siendo tachadas por especialistas y usuarias como una prenda que, pese a su tradición confortable, no es tan positiva como dicta la teoría. O, lo que viene a ser lo mismo, no es tan buena como se da a entender, ni tan beneficiosa a nivel de pisada, como muchas pueden considerar. 

zapatillas
launchmetrics spotlight

Pero, ¿qué hay de cierto en todo esto? ¿Existe, verdaderamente, una contradicción entre su confección actual y su tradición deportiva? ¿Las zapatillas son beneficiosas como se dice o debemos tener cuidado con su uso reiterado? Para desmontar todos los mitos relacionados con la utilización de las zapatillas de vestir y, más concretamente, con su uso a partir de ciertas edades, como los 50 años, contamos con el especialista Héctor Alonso.

Licenciado en Podología por la Universidad Complutense de Madrid en el año 2010 y una larga trayectoria profesional, con especialidad Cirugía Mínima Invasiva que le ha llevado a crear su propia clínica, Clínica Supie, en Valladolid; el Dr. Héctor Alonso, además, presume de una importante influencia dentro de las redes sociales gracias a su divulgación referida al universo del pie, bajo el perfil @hectoralonso.podologo.

Junto a él, ponemos en interrogante el uso de las zapatillas a partir de los 50 años, así como analizamos algunos de puntos principales que atañen a este sector del calzado como pueden ser sus hormas, tipos de cierres, plantillas o su evolución en nuevas variantes, como las conocidas como zapatillas barefoot. ¿Qué mitos son verdad y cuáles son mera ficción? Te contamos todo sobre uno de los calzados de moda dentro del gremio femenino. 

Pregunta: ¿Es recomendable que a los 50 años la mujer vista zapatillas a diario?

Respuesta: Con el paso del tiempo, la musculatura se va atrofiando y, en lo que refiere a la musculatura del pie, es importantísimo mantenerla en la mejor estructura y consistencia para que funcione eficazmente. Debido a esto, los problemas en la pisada se acentúan, y la capacidad de adaptarse a calzado inadecuado son mayores.

Es por ello que el uso de zapatillas capaces de respetar la forma del pie, con una suela suficientemente gruesa y amortiguadora, y un sistema de ajuste (cordones o velcros) adecuado, hacen que la mujer se sienta cómoda con el uso de zapatillas a diario para desempeñar las actividades de la vida diaria.

¿Qué tipo de zapatillas son las recomendables? ¿Valen cualquiera o debemos centrarnos en una horma concreta?

Eso sí, no todas las zapatillas son iguales. Para alcanzar este enfoque confortable, destaco las zapatillas que respeten la forma de nuestro pie y dejen los dedos libres y sin excesiva presión, una suela consistente y que amortigüe lo justo, no demasiado blanda, con un sistema de ajuste que haga que el pie se note sujeto y contrafuerte semirrígido.

La altura del talón respecto a la planta puede ser hasta 3 cm de diferencia, aunque esto dependerá del uso que se vaya a dar, del tiempo que vaya a caminar con ellas y del tipo de pisada de la mujer, entre los factores más importantes.

¿Unas zapatillas “de vestir” pueden alterar la pisada de la mujer a los 50?

Con relación a los calzados acabados en punta, tacones y zapatos inadecuados que han podido usar antes, las zapatillas van a mejorar en cierto modo la pisada de la mujer. Esto está relacionado con que la mujer se va a sentir más cómoda y va a caminar más, por lo tanto, y eso va a favorecer a mantener más tono muscular en general para tener mejor postura  y en la musculatura intrínseca del pie para que este sea más funcional y propulse mejor.

¿Qué rasgos debemos buscar en nuestras zapatillas para que sean buenas y saludables para nuestros pies?

Lo recomendable son materiales naturales y transpirables, así como hormas que se adapten a la forma de nuestros pies, dejando los dedos libres sin exceso de presión. En cuanto al grosor de la suela, vendrá determinado por el tiempo de pie que tenga la paciente y la duración de las caminatas que vaya a hacer con ellas, ya que el mayor grosor de la suela hará que proteja más a los pies que tengan peor pisada y vayan a caminar durante más tiempo, por ejemplo.

Zapatillas de colores
Launchmetrics Spotlight

Las zapatillas con plataformas o cuña se han convertido en grandes favoritas de este gremio, pero ¿son realmente buenas o pueden afectar a nuestro pie/pisada?

El uso abusivo de estas zapatillas puede generar problemas de sobrecarga en la zona del metatarso (planta), inestabilidades que pueden derivar en algún esguince e, incluso, pueden llevar a un acortamiento de los gemelos y problemas en las rodillas por alterar la posición corporal. Por lo tanto, en rasgos generales, no las recomendaría porque sí que dañan o alteran la pisada.

Son muchas las firmas que presentan zapatillas ‘barefoot’ como el futuro confortable, gracias a su adaptación total, ¿qué hay de verdad en ello?

No podemos generalizar, dado que existen muchas mujeres con problemas estructurales del pie, problemas en la pisada y sobrecargas de presión en algunos puntos de la planta, que hacen que el uso de ese calzado le sea incómodo y perjudicial para la salud de sus pies.

Mi consejo es que acuda a un podólogo experimentado para que le aconseje el tipo de calzado que puede usar en su caso en concreto.

Las zapatillas con cordones elásticos son otra de las favoritas entre las mayores de 50 por su facilidad, pero ¿son buenas para nuestros pies?

Cuando se tiene mala pisada, sobrecargas de presión en la planta o alguna deformidad, este calzado por sí solo cuenta con elementos que pueden ayudar, aunque no todos los modelos. Aun así, lo ideal es ir al podólogo y que nos recomiende qué modelos podemos usar y si necesitamos de alguna plantilla a medida para mejorar la pisada.

¿Qué materiales deberíamos evitar a toda costa en nuestras zapatillas a los 50? ¿Por qué?

Los materiales sintéticos y sin sistemas de transpiración hacen que el pie se mantenga húmedo y puedan aparecer con más facilidad hongos en las uñas y entre los dedos. Además, las suelas excesivamente blandas, que se doblen con mucha facilidad, pueden generar inestabilidad y sobrecargas de presión, favoreciendo callos y deformidades.

En lo que refiere a plantillas, ¿es mejor mantener la que presenta la propia zapatilla o recomiendas optar por plantillas externas?

Yo pienso que a partir de los 50 años es adecuado llevar un soporte plantar (plantilla) a medida que mantenga el pie en la mejor posición posible. Dependiendo del caso en particular, se usarán plantillas enteras, 3/4 o solo del arco con mayor o menor grosor, por lo que en cada caso en concreto será o no será necesario quitar la que lleve dentro.

Y, también, dependiendo del caso, el uso de esta plantilla a medida que comento, será continuo, a intervalos o en alguna actividad en concreto. Considero que no existe la fórmula perfecta para todo el mundo y cada caso es particular.

Por último, si tuvieras que determinar una zapatilla perfecta para la mujer de 50, ¿cuál sería?

No me gusta decir marcas, pero para que podáis tener como referencia de calzado que tienen las características que comenté anteriormente, os voy a dar tres de las que más me gustan. Con un toque moderno, Stonefly, con un estilo deportivo, Ecoalf, y con un toque clásico, Pikolinos.