El verano 2025 se perfila como una temporada de contrastes en el mundo del calzado, con propuestas que van desde la comodidad extrema hasta la sofisticación más llamativa. Las pasarelas de las grandes firmas han dejado claro que esta estación estará dominada por piezas que fusionan nostalgia y modernidad, apostando por la reinvención de clásicos con un giro contemporáneo.
Marcas como Balenciaga, Prada, Loewe y Valentino han dictado las normas de lo que veremos en las calles en los próximos meses, destacando materiales innovadores, plataformas vertiginosas y detalles artesanales que se convierten en los protagonistas de un guardarropa donde el calzado es mucho más que un accesorio: es la clave de cualquier look. Desde sandalias acolchadas de estética futurista hasta zapatillas con detalles maximalistas, el abanico de posibilidades es más amplio que nunca.
Plataformas exageradas: la obsesión por la altura continúa
Las plataformas siguen siendo las reinas indiscutibles del verano, y para 2025 alcanzan nuevas dimensiones. Marcas como Versace y Vivienne Westwood han llevado esta tendencia al extremo con diseños que desafían la gravedad. Los mocasines con suelas gruesas, las sandalias de tiras elevadas y los zuecos XL aparecen como piezas esenciales en cualquier armario de temporada.
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Esta fiebre por la altura no solo responde a una cuestión estética, sino también funcional: la comodidad se mantiene intacta gracias a las plantillas ergonómicas y materiales ultraligeros. En las pasarelas, Balmain presentó modelos en tonos vibrantes, mientras que Michael Kors apostó por un enfoque más sobrio con plataformas en tonos neutros y acabados en piel. Sin duda, esta tendencia es ideal para quienes buscan ganar centímetros sin renunciar a la estabilidad.
El regreso de la artesanía: sandalias trenzadas y detalles naturales
Las técnicas tradicionales de confección cobran un protagonismo absoluto este verano, con diseños que rinden homenaje a la artesanía más pura. Las sandalias de tiras trenzadas, inspiradas en los clásicos modelos mediterráneos, se han convertido en una de las apuestas más fuertes de firmas como Chloé y Jacquemus. Materiales como rafia, cuerda y cuero trenzado dan lugar a modelos versátiles que combinan a la perfección con vestidos fluidos y conjuntos bohemios.
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Además, las casas de moda han elevado esta tendencia con acabados lujosos y detalles dorados que aportan un toque sofisticado. Isabel Marant, por ejemplo, presentó en su colección de verano modelos con trenzados intrincados, demostrando que la artesanía también puede ser moderna y vanguardista. Esta corriente resuena con la creciente preferencia por la moda sostenible, donde la calidad y la durabilidad priman sobre las tendencias pasajeras.
Zapatos con transparencias: la sensualidad sutil del PVC
El PVC y los materiales translúcidos continúan su ascenso en la moda del calzado, con una presencia notable en las colecciones de Fendi y Mugler. Sandalias de vinilo, mules con detalles transparentes y stilettos con efecto cristal se convierten en la opción perfecta para quienes buscan un toque futurista y sensual en sus estilismos.
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Estos diseños, que juegan con la ilusión óptica y la ligereza, permiten estilizar la pierna sin sobrecargar el look. Firmas como Amina Muaddi han apostado por tacones esculturales en acrílico, mientras que Chanel ha reinventado las clásicas bailarinas con puntas transparentes. Esta tendencia, que ha conquistado a celebridades e influencers, es una de las más versátiles del verano, ya que combina con una gran variedad de outfits, desde los más minimalistas hasta los más atrevidos.
Peep toes: el regreso de la feminidad clásica
Uno de los grandes regresos del verano 2025 es el de los peep toes, esos icónicos zapatos de punta abierta que evocan la elegancia clásica con un toque retro. Firmas como Dior y Miu Miu los han rescatado en versiones sofisticadas con tacón medio, lazos y acabados en satén, mientras que Saint Laurent los ha reinterpretado con detalles en vinilo y tacones esculturales.
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Este modelo, que permite un equilibrio entre sensualidad y comodidad, es ideal para estilizar la pierna sin renunciar al aire fresco en los días más cálidos. Se pueden llevar tanto en looks de oficina como en estilismos más sofisticados para la noche, combinando perfectamente con vestidos midi, pantalones sastre o incluso vaqueros de corte recto para un look effortless chic.
Mocasines: la reinvención de un clásico
Los mocasines se consolidan como el calzado estrella para quienes buscan elegancia sin esfuerzo. Lejos de ser una opción exclusivamente otoñal, este clásico ha sido reinterpretado para el verano con suelas ligeras, colores vibrantes y detalles innovadores como cadenas doradas, bordados y aplicaciones de pedrería.
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Loewe y Gucci han apostado por modelos en tonos pastel y acabados metalizados, mientras que The Row ha presentado versiones con materiales de calidad y acabado minimalista. Además, los mocasines con suelas chunky siguen en tendencia, demostrando que pueden combinar a la perfección con shorts, faldas fluidas y hasta vestidos veraniegos, aportando un toque sofisticado y actual.
Náuticos: el calzado más versátil del verano
Los náuticos, ese calzado de inspiración marinera que nunca pasa de moda, se posicionan como una de las opciones más cómodas y versátiles del verano 2025. Varias casas de lujo han apostado por modelos en cuero premium con costuras artesanales, mientras que firmas más vanguardistas han jugado con colores llamativos y materiales innovadores como el lino y el neopreno.
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Perfectos para looks casuales pero elegantes, pueden llevarse con pantalones de lino, bermudas o incluso vestidos camiseros, adaptándose tanto a estilismos urbanos como a escapadas a la costa. Su diseño ligero y su comodidad los convierten en un imprescindible para quienes buscan un calzado sofisticado sin renunciar a la frescura.
Sandalias de dedo: la reinvención del minimalismo veraniego
Las sandalias de dedo, que tradicionalmente han sido vistas como un calzado informal, se elevan a un nuevo nivel con la llegada del calor. Firmas como Moisés Nieto, Bottega Veneta y Hermès han apostado por versiones refinadas, con tiras de cuero de alta calidad, suelas acolchadas y un diseño depurado que las convierte en la opción ideal para un look relajado pero sofisticado.
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Este tipo de sandalias es perfecto para los días en los que las altas temperaturas se dejan notar y se pueden llevar con vestidos fluidos, pantalones anchos o incluso sastrería ligera para un contraste interesante. Su versatilidad y comodidad las convierten en el mejor fondo de armario de la temporada.
Las pasarelas han hablado, y las calles se encargarán de confirmar qué tendencias se consolidarán como imprescindibles. Lo que está claro es que este verano nos invita a jugar con los contrastes, apostando por zapatos que no solo complementan un look, sino que se convierten en el verdadero protagonista.