Decorar con cuadros es una buenísima idea pero, lo confesamos, a veces no sabemos por dónde empezar y nos bloqueamos sin remedio. Si a ti también te pasa ¿te gustaría contar con una guía abreviada con las claves para acertar seguro sin perder los nervios por el camino?
Para empezar, si es la primera vez que vas a crear una composición te recomendamos que te lo tomes con calma, no dejes nada al azar y empieces por lo más sencillo. Ya tendrás tiempo de experimentar incorporando diversos elementos y muchos más cuadros.
¿Qué es una composicion de cuadros? Los mejores trucos
- Hilo conductor. En todas las composiciones hay al menos un nexo de unión entre sus elementos, ¡esa es la clave del éxito!
- Paso a paso. Todo lleva su tiempo. Elige la pared, selecciona tranquilamente los marcos y asegúrate de que te gusta cómo queda.
- Sencillo. Empieza con proyectos fáciles que tengan marcos iguales y, si quieres, de distinto tamaño para que no sea aburrido.
- Marco collage. Evita los marcos que admiten más de una foto. Funcionan bien solos pero no tanto en composiciones.
- Paciencia. Taladrar o agujerear la pared no es ninguna tontería. Si no estás inspirada o te da pereza déjalo para otro momento pero nunca calcules a ojo.
- Muebles. Si en la pared hay otros muebles como un sofá, una cómoda o una mesita auxiliar, asegúrate de que el espacio entre ellos y el borde inferior del marco sea de unos 25 cm o no te gustará el resultado.
- Complementarios. Para que las composiciones de cuadros queden bien hay que pensar en ellas como un conjunto de elementos que aportan algo a partes iguales y funcionan perfectamente como un todo, no como una competición en la que solo uno destaque.
- Otros elementos. Tu composición resultará todavía más interesante si intercalas otros elementos como espejos, flores o plantas.
Sigue leyendo porque te contamos todo lo que necesitas sabes para crear una composición de cuadros.