Además de la pasta, las hortalizas y verduras rellenas son de las primeras recetas que solemos aprender a cocinar. Berenjenas, patatas y calabacines suelen ser las estrellas en este sentido. Y es que, son facilísimos de preparar, muy completos nutritivamente hablando y están riquísimos. Siguiendo esta línea, hoy te propongo recetas saludables, fáciles y rápidas de champiñones rellenos, que también dan muy buen resultado y quedan muy bien si tienes invitados en casa. 

Además, no solo están ricos y sabrosos sino que tienen efecto saciante, bajo contenido en calorías, pero rico en fibra y agua, con lo que se convierten en una opción estupenda tanto para las comidas como para las cenas. No son complicados de preparar pero sí es necesario que sepas los trucos para que te queden de 10. Escogerlos de buen tamaño, limpiarlos bien y que no se oxiden son algunas de sus claves.

Champiñones con queso y jamón
Cocina Fácil | RBA

Gratina los champiñones para darles el último toque.

Otras de sus virtudes es que lo encuentras fácilmente en el supermercado, tanto fresco como en conserva. Recuerda que para rellenarlos tendrán que estar enteros, así que olvídate de los laminados.

Así tienes que limpiar los champiñones para rellenarlos

El éxito de una receta también está condicionado por su materia prima así que escoge unos champiñones de calidad con el sombrerito bien grande para que sea más fácil rellenarlos (y quepa más). Escoge los que sean blancos y firmes y descarta aquellos que tengan manchas oscuras o estén pegajosos. 

Cuando vayas a lavarlos, pásalos por agua pero no los dejes en remojo porque enseguida se ponen negros. Para evitarlo, rocíalos con unas gotas de limón. También hay quienes los sumergen en agua con el zumo de esta fruta. Sécalos siempre muy bien con papel absorbente. Corta la parte terrosa del tallo y pícala para aprovecharla para otra elaboración.

TRucos para sacarles partidazo a los champiñones

  • Si vas justa de tiempo y no quieres rellenarlos, trocéalos, rocíalos con limón y sírvelos con lascas de parmesano.
  • También están riquísimos con ajo y perejil y simplemente a la plancha y al horno. 
  • ¿Quieres aprovechar su intenso sabor? Hazlos en crema o salsa para guarniciones o pasta.
  • Acompáñalos de pollo, carne o pescado, pasta o arroz. Con  huevo frito, en revuelto o en tortilla, también están deliciosos ¡y llenos de proteínas!

Pasamos ya a la parte práctica. Verás qué recetas más completas y nutritivas. Incluso tienes varias con huevo; eso sí, tiene que ser de codorniz o no cabrá.