Como en el mundo de la moda, las tendencias en el sector de la belleza también van cambiando con el tiempo, viendo como prevalecen algunas técnicas por encima de otras. Una de las que llevamos tiempo teniendo en el radar, y que parece que se ha convertido en la esencia de cualquier rutina de skincare, es la doble limpieza.
Esta proviene de la belleza coreana, que se ha popularizado en todo el mundo por sus beneficios. “La limpieza facial es un paso imprescindible en cualquier rutina cosmética, que debe realizarse a diario, siendo fundamental por la noche. A lo largo del día se acumulan restos de suciedad y la doble limpieza ayuda a retirar todas estas sustancias de una manera más exhaustiva que usando un único limpiador”, explica la Dra. Ana Mercedes Victoria Martínez (@dra.anavictoriaderma) de Clínica Inderma.
Productos clave que no pueden faltar en la doble limpieza
Apivita Foam Cleanser Face & Eye
Esta es una crema espuma limpiadora formulada con oliva, lavanda y propóleo que limpia eficazmente el rostro y los ojos, evitando es sequedad en la piel y tirantez que tanto buscamos evitar.
Agua micelar de garnier
Esta es otra alternativa para aplicar el primer paso, tal y como nos comentaba la experta, especialmente en pieles grasas. Extrae la suciedad y las impurezas sin secar la piel, eliminando los residuos en una sola pasada.
Gel Limpiador Espumoso de cerave
Esta es una de mis marcas preferidas, y en concreto este producto lleva en mi rutina de belleza años. Crea una espuma suave para limpiar profundamente el rostro, sin alterar la barrera natural de la piel, y cuenta con 3 ceramidas esenciales y ácido hialurónico.
Melting Balm Cleanser de Byoma
Este es un bálsamo limpiador hidratante, perfecto para las que prefieren la opción en sólido, que contiene una barrera lipídica, extracto de aceite de oliva y aceite de pepitas de uvas que hace desaparecer el maquillaje, la protección solar y las impurezas más difíciles de eliminar.
Camellia Bloom Milky Cleansing Oil de alma secret
Aunque no lo creas, hay aceites limpiadores que son aptos para todo tipo de pieles, como este de aquí. Ayuda a limpiar en profundidad, al mismo tiempo que cuida y protege la barrera cutánea, formulado con 2 activos únicos: Biotensioactivos suaves a base de Colágeno vegano y Redupore®.
Agua micelar de La Roche Posay
Esta es otra alternativa de agua micelar, formulada específicamente para pieles reactivas y sensibles. Su función es la misma que cualquier otra, pero asegurándonos que no nos salen rojeces o irritaciones tras su uso.
Purifying Tea Tree Gel de Masqmai
Este producto es ideal para las que se notas los poros obstruidos, gracias a que contiene ingredientes naturales que limpian en profundidad la piel y eliminan el exceso de grasa y las impurezas. Su fórmula incluye ingredientes con propiedades calmantes, reparadoras y cicatrizantes.
Total Cleans'r de Fenty Skin
Por último, pero no menos importante, fichamos este limpiador cremoso para el segundo paso, que afina el aspecto de los poros dilatados y elimina al instante la suciedad, la grasa y las impurezas sin tirar, dejando la piel fresca y limpia.
¿Cómo se realiza la doble limpieza?
Este método consiste en realizar dos fases de limpieza en el rostro para eliminar todas esas impurezas. En la primera, se utiliza un limpiador a base de aceite para disolver el maquillaje, protector solar y el exceso de sebo que se acumula en la piel. En la segunda fase, se emplea un limpiador a base de agua, como un gel o espuma.
Este paso es crucial para eliminar las impurezas más profundas, como el sudor, la suciedad y las partículas contaminantes que pueden quedar en los poros. Además, también ayudamos a equilibrar el pH de la piel, dejándola fresca y preparada para recibir los siguientes pasos de la rutina de cuidado facial.
¿Es apta para todo tipo de pieles?
Está claro que realizar una limpieza correcta es algo básico para todas las pieles, independientemente del tipo que sean. Con lo cual, la doble limpieza también lo es, aunque siempre adaptando los productos que utilicemos en cada caso a nuestras necesidades cutáneas.
“Por ejemplo, en caso de pieles grasas, con tendencia a acné, el primer paso de la doble limpieza con productos oleosos se debe realizar con mayor precaución, pudiendo usar aguas micelares más ligeras, libres de aceites, formuladas específicamente para pieles acneicas y como segundo paso pueden ser beneficiosos limpiadores con alfa o betahidroxiácidos (glicólico o salicílico) que tienen un efecto seborregulador. En el caso de pieles con rosácea o pieles atópicas, la limpieza debe ser más suave, con productos formulados específicamente para estos tipos de pieles, por lo que es recomendable individualizar y consultar con un dermatólogo previamente”, afirma la experta.
*Precios actualizados el 27 de septiembre de 2024